Desafío

Ángel Cerdá, firma española de mobiliario de diseño contemporáneo, lo tenía claro. Contaban con un posicionamiento fuerte en el canal tradicional, pero su presencia en marketplaces no reflejaba ni su propuesta de valor ni su potencial internacional. El reto era ambicioso: reforzar su visibilidad en países clave como Alemania, Francia e Italia, aumentar las conversiones y consolidarse como una marca de referencia en el canal digital sin perder su identidad.

Vender muebles online no es tarea fácil. En un sector donde el cliente quiere ver, tocar y probar antes de comprar, destacar en un entorno digital tan competitivo como son los maketplaces requiere algo más que buen producto: hace falta estrategia, adaptación y mucha coherencia de marca.

Y, además, hacerlo con una estrategia multimarketplace real. Desde el primer momento, se planteó un enfoque donde Amazon no era el único protagonista, sino un pilar más dentro de una red de canales cuidadosamente seleccionados. El objetivo era claro: adaptar la propuesta de valor de Ángel Cerdá a cada entorno digital, entendiendo el tipo de cliente que visita cada plataforma y alineando contenido, pricing y publicidad a las expectativas de cada uno. En el mundo del mobiliario, esto significa ir donde está el consumidor final, tanto el que busca por precio, como el que prioriza diseño, calidad o experiencia de compra.